Con vuestro permiso
Como os contaba en la entrada anterior Nerim ( J. Miren Asteinza) ayudaba a quien se lo pedía ( o sin que se lo pidieran) ella se ofrecía para mejorar el blog , o incluso para abrirlo.
Mi " Pasatiempo", aunque lo abrí yo, la apariencia que tiene actualmente se la debo a ella y claro, tenía la clave para entrar en él.
Al día siguiente de haberle dicho que estaba preparada la presentación de su libro en Madrid a falta de que ella confirmase si le venía bien la fecha, entró en mi blog (tenía la clave) y en él publicó este relato que os dejo.
Mi añorada tristeza
Decía Oscar Wilde que no es difícil encontrar personas que quieran compadecerse de nuestras penas, pero que es extraordinariamente raro que alguien se alegre sinceramente de nuestros triunfos. Y añadió que un amigo así, ha de tener una naturaleza delicadísima.
Sin saber cómo
ni cuándo nació mi Tristeza. Como a todo lo que nace de mí, cuidé de ella con
devoción y ternura. Y mi Tristeza fue creciendo grande y hermosa junto a mí.
Nos hicimos tan afines, que si desaparecía aunque solo fuera por un instante,
miraba por todos los rincones de mis adentros buscándola desesperadamente,
rogando que no se hubiera perdido deambulando por los recovecos de mi alma. Y
cuando por fin encontré a mi Tristeza, charlamos de manera elocuente, pues mi Tristeza era gentil y yo era afectuosa con
mi Tristeza. Tantas cosas compartíamos, que amigos y vecinos nos observaban con
ojos amables y susurraban palabras desbordantes de dulzura.
Pero, mi
Tristeza murió, como todo ser viviente, y quedé sola para inspirarme y meditar.
Mas Dios es
grande y me concedió lo más valioso que persona alguna pueda tener. Una amiga
de gran corazón y de una delicadísima naturaleza que en silencio tejía con
hilos de seda esperanzas quiméricas. Y así, teje que te teje, el pasado día 3 de febrero, nacía de su mano mi Alegría. Y ahora, mi Alegría crece, fuerte, sana
y hermosa como en su día lo hizo mi añorada Tristeza.
Mi querida
Chelo, ¡qué grande eres! y cuanto te quiero.
Nerim (7-2-2013 )
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No, no me lo mandó por correo interno y para que yo lo publicase , no, lo publicó ella directamente ¿Sabéis lo eso significó para mí? Pues si no lo sabéis no os lo puedo explicar.Si queréis leer la entrada original y lo que allí comentaron os dejo el enlace
Ella se mereció toda mi confianza y mi cariño. Un día me dijo que se debería mejorar la apariencia de mi blog y sin dudarlo le di la contraseña, en el secreto de ambos está su mano hábil y voluntad de hacer el bien. Por eso te sigo queriendo, Nerim, porque eres la persona ideal.
ResponderEliminarBesos.
Mucha confianza demuestra el relato tanta como para entregar a alguien la llave de su casa. Abrazo, Chelo.
ResponderEliminarYa me gustó entonces y ahora pasado el tiempo tiene un sabor mas dulce, he seguido el enlace, y he encontrado a Trimbolera, tambien la recuerdo con cariño. Es hermoso recordar a los amigos y hacerlo en voz alta. Un abrazo grande
ResponderEliminarQué texto tan bonito, está lleno de sensibilidad y qué amistad tan linda entre vosotras.
ResponderEliminarFeliz comienzo de semana.
Que detalle, bueno no es un detalle es una prueba de una gran amistad y un querer de verdad. Me alegro Chelo amiga así siempre están en el alma de una.
ResponderEliminarEl texto es precioso por qué a mi entender significa que la tristeza tiene su lado positivo como la alegría, es cuestión de proyectar en una de buena manera. Un besote grande y gracias por compartirlo.
Ahí fui a ver la entrada original y dejé mi comentario, un ejemplo de hermosa amistad, un abrazo Chelo!
ResponderEliminarMe he emocionado al leer esta entrada tan emotiva. Una amistad así es un valiosísimo tesoro.Besicos
ResponderEliminarHola Chelo.. Bonito recuerdo a tu amigo. Dicen que los hermanos no siempre son amigos, pero los amigos siempre serán hermanos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gestos así son los que hace grandes a las personas y a la amistad. Te felicito, Charo, es precioso el gesto de Narim.
ResponderEliminarMil besitos para ambas y feliz semana ♥♥
Una emocionante entrada, simplemente por algo así ya merece la pena estar ahí y vivir. Un gran gesto y una preciosa amistad. Mis felicitaciones a ambas.
ResponderEliminarUn gran abrazo y buena semana.
Es bonito recordar Chelo, una amiga inolvidable.... Saludos.
ResponderEliminarHola, Chelo
ResponderEliminarMe he maravillado leyendo y observando tu blog, me quedo.
Acerca de tu publicación, existen pocas personas que obren de manera desinteresada, cuando damos con una de ellas, hay que atesorar su amistad, conservarla y ser recíprocas. Me alegro por ti.
Cordiales saludos.
Imagino cuánto te emocionó, Chelo...Se te quedo grabado y es un momento mágico, que siempre está vivo en tu alma y quizá cuando lo recuerdas,ella vuelve de nuevo contigo, porque seguramente hay una preciosa sincronía entre vosotras. Bravo por Nerim.
ResponderEliminarMi gratitud y mi abrazo entrañable por traerlo.
No recordaba esta entrada tan emotiva. Por cierto que al entrar en el enlace veo que la habia visto en su momento, y dejé mi comentario.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Chelo.
Muy interesante, y es trsiteza y alegría viven o nacen en nosotros.
ResponderEliminarUn abrazo