Páginas

miércoles, 12 de septiembre de 2012

Alrededores de Aveiro (Portugal)


Cansados de un día de turismo  llegamos  a Costa Nova queríamos relajarnos, darnos un baño y recordar,  la niña (por decirlo de alguna manera) lo iba a conocer ella era demasiado pequeña cuando estuvimos por aquí.

Costa Nova situada a unos 12 km del centro de Aveiro  y   conocida, más que por sus playas, por sus tradicionales casas de madera de los pescadores  los palheiros-,  pintadas  con rayas de colores que trasmiten  una alegría que perpetúa el colorido de la época estival  a lo largo del año.
El fuerte viento  hizo que la bandera roja nos negara  el baño


Fue en la popular  praia da Barra, Ílhavo, donde disfrutamos de  la suavidad de la arena y  del sol pero no del agua, demasiado fría para nosotros.


Faro de Ílhavo considerado uno de los más grandes de Europa

Si vais por Ílhavo no dejéis de visitar  el Museo Marítimo y la fábrica de porcelana de Vista Alegre

En nuestro recorrido por las playas llegamos  al pueblecito  de pescadores que no conocíamos, Mira,  que ocupa una larga franja de costa de arena. Su colorido, la arena,  la vegetación  y, sobre todo, su luminosidad hacen que a esta zona se le denomine  Ruta de la luz.

 
 La zona de los pescadores 

Remolques, redes y barcas de los pescadores.




¿Es un   palheiro?

¡NO!  es la capilla de los pescadores donde se acababa de celebrar una boda.  



En toda esta zona sopla un fuerte viento que, además de hacer las delicias de los surfistas, hace que las  playas tengan un aspecto muy peculiar.
 



Las casetas  se alquilan  igual que en el Mediterráneo se alquilan las tumbonas .




Dejando la playa atrás, entramos en el pueblo y nos encotramos con una ría natural de agua dulce,  la ría Barrinha,  y unos  grandes bosques de pinares en los alrededores,   todo eso,  unido a la amabilidad de lugareños  hace  de este pueblo un lugar para volver.



 Año 1986 Vagueira.
 

 con rayas y unos poco de años menos


¿Qué hacen los bueyes en la playa?


En algunos pueblos de esa zona, se practica aún la pesca conocida como Xávega. Esta técnica de pesca, realizada en la orilla, consiste básicamente en extender una red desde una barca que se aleja unos  kilómetros de la orilla y al cabo  de unas horas, se recoge la red desde la misma playa, acercándola lentamente hasta el litoral.

 
Hace años eran los bueyes los encargados de remolcar las barcas a la orilla y era un espectáculo único.
Daba la sensación de que el buey se volvía ligero  y como un niño  se le veía salpicar el agua y trotar arañando con sus patas las arena de la playa.
Al llegar a la orilla los pescadores abren la red y  peces,  de distintos tamaños y especies, vivos aún, saltan  queriendo escaparse mientras su color plateado emite tantos  destellos que te dañan la vista. Y en ese mismo lugar empieza la venta.
Hoy se sigue realizando ese arte de pesca pero son los tractores los encargados de sacar la red del mar.

Vagueira año1986

Esta foto se encuentra como recuerdo histórico en muchos lugares públicos, nosotros somos de los afortunados que la tenemos en nuestro albun y  además en la retina.




25 comentarios:

  1. Jeje! Sí, doy fe: el agua es heladora!! El día que fuimos a la playa de Mira no nos pudimos bañar porque había un oleaje tremendo.
    Qué curioso, lo de los bueyes! Abrazo!

    ResponderEliminar
  2. Una verdadera preciosidad. Unas fotos muy bellas y unos recuerdos inolvidables y revividos en esta visita, después de tanto tiempo a Aveiro. Como dices, tenéis suerte de atesorar esas imágenes en vuestros álbumes y en la retina. Son preciosas. Intensas. Un abrazo enorme.

    ResponderEliminar
  3. Estuvimos por esa zona en un camping.Ese paseo con las casas de colores es precioso. Y un día en la playa vimos esa forma de pescar con los bueyes.
    Ver llegar a la arena la bolsa llena de pesces vivos es una maravilla, Tengo que escanear esas fotos de papel y meterlas en el blog.
    Gracias por traerme los buenos recuerdos que guardo de ese viaje
    Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En esa época nosotros también hacíamos camping y viajabamos en un furgoneta. Estuvimos precisamente en un camping de Vagueira.

      Estaré encantada de ver tus fotos cuando las publiques e incluso te robaré algunas.

      Un abrazo

      Eliminar
  4. Siempre me han gustado las barcas de los pescadores portugueses (recuerdo las de Nazaré, es que parecen babuchas!)y esas playas tan peculiares.

    Veo, por lo que te voy leyendo, que el verano a dado mucho de sí, y que además habéis hecho un turismo revival!

    Besotes, guapa!
    ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En el año 86 llegamos a Nazaré buscando la pesca con bueyes, que era donde la situaban las guias turísticas, los lugareños nos contaron que hacía muchos años que habían sido sustituidos por tractores. Habíamos dejado de preguntar y dada nuestra causa por perdida cuando aperecieron en la playa de Vagueira, la sorpresa y la alegría fue enorme, sobre todo la de los adultos, los niños (11 y 6 años) no fueron muy conscientes de lo que estaban viendo.

      En todos estos lugares las barcas de los pescadores tienen esa forma y colores muy llamativos como puedes apreciar en las de Mira y en las que puse en la entrada de las dunas.

      Un abrazo

      Eliminar
  5. Tú contando de tu viaje en pasado y yo agotando mis días moscovitas, no mis entradas en el blog, las cuales seguirán dejando estela.
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya sé que tendremos muchas entradas más pues sólo vas poniendo pinceladas.

      Un abrazo

      Eliminar
  6. Hicimos un viaje a Portugal que me encantó y ahora me vienen los recuerdos en tropel. Es curioso y bonito conocer las tradiciones de cada lugar, lo de los bueyes es un espectáculo. Gracias Chelo.

    ResponderEliminar
  7. Un verano planeamos ir a las playas de Portugal y se truncó el viaje. Viendo tus fotos y leyendo tus textos me están dando ganas de volver a planear el viaje.

    Un beso Chelo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Elena si quieres bañarte en las playas de Portugal te tienes que ir al Algarve pues en cuanto subes un poco el agua está fría.
      Un abrazo

      Eliminar
  8. Como siempre Chelo, nos haces partícipe de tus viajes, y lo cuentas tan bién, que nos transportas para nuestro disfrute
    Un fuerte abrazo
    Leonor

    ResponderEliminar
  9. Gracias Chelo por tu paseo que también disfruté yo a través de tu relato.
    Beso

    ResponderEliminar
  10. Esa foto de los bueyes es un verdadero documento. La de la iglesia de la boda muy oportuna para mí. Un saludo desde mi mejana

    ResponderEliminar
  11. Un magnífico reportaje y fotos. Que suerte tener estas fotos con los bueyes que ciertamente son históricos. Muy pintorescas las casetas. Dan mucha intimidad. Gracias por paseo.
    Bss

    ResponderEliminar
  12. Sí, recuerdo que intenté pero salía que la página no se encontraba.
    Buena entrada Chelo, porque volver al año 1986...supone sonreir y recordar!!!
    El ayer y el hoy unidos por unas imágenes de Portugal.
    Lo de la boda, buenísimo!!! Besos.

    ResponderEliminar
  13. Me encanta como presentas tus vacaciones y tu viaje. Nos introduces en los lugares de una manera muy natural e interesante. No había oído nunca hablar de esta zona pero veo que merece mucho la pena.
    Un abrazo fuerte

    ResponderEliminar
  14. Lugares paradisíacos que dan más ganas de conocerlos con tu encantadora reseña. Saludos cordiales.

    ResponderEliminar
  15. La foto de los bueyes es antológica, hay que ver que cambio de panorama en tan poco tiempo.
    Yo, que aún no me he ido de vacaciones a ninguna parte, me quedo ensimismada viendo las fotos de vuestras crónicas de viaje.

    Un beso y un fuerte y calido abrazo

    ResponderEliminar
  16. Hola Chelo, muy buenas tardes, he disfrutado el viaje con tan bonitas imagenes, son preciosas las playas de Portugal, no he ido nunca, gracias querida amiga por compartir tus letras y lindas imagenes, te dejo besos y abrazos grandote, con cariño, Lola.

    ResponderEliminar
  17. Hermosas imágenes, llegan y nos llevan junto a ustedes que pudieron vivir esos paisajes.
    Felicidades.

    ResponderEliminar
  18. Como me gusta esta crónica que nos dejas Chelo. Tanto como el País vecino, es una preciosidad!

    Y cuánto aprendemos!! nunca había oído nada sobre la xávega, debió ser fantástico captar esa fotografía, gracias por compartirla amiga mía.

    Lo mejor de viajar es lo que se aprende y todo lo que se puede compartir con los demás: Emociones e ilusiones a la vez.

    Besos guapa!

    ResponderEliminar
  19. Chelo,gracias por tu presencia,amiga.
    Me encanta este viaje,donde podemos ver a través de las fotografías el paisaje entrañable,que nos va relatando junto a tus letras los pormenores de esos instantes vividos e inolvidables.
    Mi gratitud por compartir y mi abrazo inmenso por tu buen hacer.
    Feliz semana,Chelo.
    M.Jesús

    ResponderEliminar
  20. A la velocidad que va la vida, hay veces que tardas un tiempo en pasar por un determinado lugar, pega un cambio casi irreconocible, y no se parece en nada al recuerdo que se tenía, es lo que ha pasado con lo foto de los bueyes y los tractores.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  21. Bonitos lugares y muy clara reseña para disfrutar a pleno de las fotos. Una entrada refrescante y encantadora. Un abrazo.

    ResponderEliminar

Gracias por pasar tu tiempo conmigo.