Saliendo de Puerto Madryn y pasando por Trelew llegamos a la Ruta nacional Nº3 hasta empalmar la Ruta Provincial Nº 75 que va directamente a la Reserva Natural. Todo el camino, aproximadamente 107 km, es de asfalto salvo los últimos kilómetros antes de la Reserva que no fueron asfaltados para preservar el hábitat del lugar.
Durante el trayecto volvemos a contemplar la árida meseta patagónica con los guanacos. La ruta atraviesa varias estancias (propiedades privadas) en las que hay una gran cantidad de corderos que están sueltos y desperdigados y de los que tan sólo una vez al año hacen recuento sus dueños. La pingüinera pertenece a una de esas estancias.
Imagen cogida de Google en la época en la que fuimos ya no había tantos |
Punta Tombo es una franja estrecha y pedregosa que penetra en el mar unos 3,5 km y que está rodeada del típico paisaje árido y solitario de la meseta patagónica. Allí se encuentra la mayor colonia de pingüinos de Magallanes conocida en todo el mundo, con aproximadamente medio millón de ejemplares (unas 200 mil parejas reproductivas).
Cada año a principio de septiembre, los machos empiezan a llegar a reacondicionar los nidos de años anteriores. Luego, arriban las hembras; las que ponen dos huevos a comienzo de octubre y tras 40 días de incubación compartida con el macho nacen los pichones. Ahí estarán hasta las crías son adultos y luego emprenden el viaje de regreso hacia el noreste de Sudamérica y cíclicamente regresar al año siguiente.
En 1979 la provincia de Chubut la declaró Reserva Faunística para proteger a los Pingüinos de Magallanes y las especies que conviven con ellos.
Como niños íbamos de un sitio a otro, mirando nidos, buscando crías, haciendo fotos grabando.
Con las crías en el nido |
Mas crías |
Hay que dejarlos cruzar viene del mar y su caminata desde y hacia el mar para alimentarse y traerle comida a sus crías, pueda ser de 1 km aproximadamente.
Además de los pinguinos podemos encontrar otras especies que conviven con ellos en el parque como los guanacos y los cuis
Al fondo el guanaco |
Los cuis no me gustaron nada pues se parecen a las ratas |
Estuvimos por allí hasta que nos cansamos, sin prisa y al regreso una parada técnica en Gaimán, conocida fundamentalmente por su tradición galesa manifestada en las Casas de Te Gales y por las construcciones en piedra y ladrillos visto.
Rio Chubut a su paso por Gaimán |
De vuelta en Trelew, nos dio tiempo a ir al Museo Paleontológico Egidio Feruglio (ese que anunciaban en el aeropuerto y que tenía muy buena pinta) está instalado en una construcción de estilo muy moderno y en sus salas se exponen muestras fósiles de ejemplares de la región, destacando el Carnotaurus sastrei, único dinosaurio carnívoro del mundo que poseía cuernos, y una nidada de huevos de Tiranosaurio de hace 65 años
Carnotauros sastrei |
Y de ahí, a la última etapa del viaje, las cataratas del Iguazú.
Chelo,gracias por este post maravilloso dónde podemos ver todas estas maravillas de la naturaleza,que delicia de paisaje,pinguios,los cuis.....verdaderamente en le mundo aún quedan auténticas divinidades.
ResponderEliminarMil millones de besitos queridídima amiga.
Extreordinaria entrada. Me han encantado el texto y las fotos, que son muy interesantes.
ResponderEliminarUn abrazo, amiga
Madre mía cuánto pingüino, y qué gracia verlos en ese terreno que parece un páramo seco.
ResponderEliminarHija, qué envidia te tengo por tus viajes.
Un beso.
Maravilloso lugar y unas fotos estupendas que dejan ver lo tierno de las especies del lugar.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ver a los pingüinos al lado de las personas nos da idea de lo pequeñines que son. De verdad será una delicia verlos al natural. Felicidades.
ResponderEliminarQué bonito recorrer esas tierras, el matiz de pasear dejando paso a los pingüinos me ha gustado.
ResponderEliminarA través de este instructivo y bonito post he podido conocer esa parte del mundo, con ese maravillosso paisaje y esos pinguinos caminando como cualquier humano en busca de algo de alimento que llevar a sus crias.
ResponderEliminarMe ha encantado este post Chelo, todo un lujo.
Un fuerte y calido abrazo
No puede ser, Chelo. Tienes que sacarme a esos mundos y airearme, mostrarme lo mucho que conoces y hacerme partícipe de todo ello. Soy muy agradable compañía, cargo con las maletas, lustro los zapatos, soy amable divertido, buen conversador y profundamente agradecido. No lo olvides: tenme presente para la próxima escapada.
ResponderEliminarAcá en el Perú el cuy es muy popular. Se come de muchas maneras y dicen que es muy rico, pero debo confesar que nunca lo he probado.
ResponderEliminarDices que los Cuis no te gustan nada porque se parecen a las ratas, en Perú los ponen a la plancha y se los comen, algo que yo también he hecho después de salvar todos los prejuicios.
ResponderEliminarSaludos
De veras que me encantan vuestros Blogs. A cual de todos más bonito...Me vais a tener que enseñar como los hacéis así de bonitos y con un contenido tan interesante...
ResponderEliminarUn abrazo con cariño, amiga!!
¡Pero que hermosas fotografías...! Escribes muy bien. Me han encantado. Volveré. Un beso.
ResponderEliminarDescribes todo tan detallado, que siento que viaje contigo,y perdona mi ignorancia, pero estoy completamente desubicada, esto es en Argentina ?. Un beso Martha.
ResponderEliminarAcabo de llegar y aun no he tenido tiempo de nada tras dos semanas sin poder visitarte. A er si me pongo al día. Saludos
ResponderEliminarQue viajes tan preciosos, es un encanto ver esos paisajes a través de tus fotografías.Espero que lo sigas pasando tan bien.
ResponderEliminarUn beso.
Hola Chelo ya sabes que anduve fuera pero no he querido perderme tu viaje. Conozco este sitio a través de fotos de viajes que han hecho amigos y porque los pingüinos me caen muy bien. Un viaje sin duda diferente y para disfrutar de la grandeza del paisaje. Las fotos bellísimas.
ResponderEliminarUn beso
bellissimo panorama, peccato che la patagonia si sta trasformando sempre di più in una fregatura per turisti e non cercano di migliorare. prezzi alti, spesso dollarizzati
ResponderEliminarMuy lindo !
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