Páginas

lunes, 14 de mayo de 2012

El Cero, el Uno y el Dos



Graves autores contaron
que en el país de los Ceros
el Uno y el Dos entraron;
y, desde luego, trataron
de medrar y hacer dineros.

Pronto el Uno hizo cosecha,
pues a los Ceros honraba
con amistad muy estrecha,
y dándoles la derecha,
así el valor aumentaba.

Pero el Dos tiene otra cuerda,
¡todo es orgullo maldito!
Y con táctica tan lerda,
los ceros pone a la izquierda,
y así no medraba un pito.

En suma, el humilde Uno
llegó a hacerse millonario,
mientras el Dos importuno
por su orgullo cual ninguno
no pasó de un perdulario.

Luego ved con maravilla
en esta fábula ascética,
que el más baja más brilla,
y el que se exalta se humilla
hasta en la misma Aritmética.

Cayetano Fernández – (Cádiz, 1820 - Sevilla, 1901)


26 comentarios:

  1. Bonita poesía y más bonito aún, si cabe, el dibujo. ¡Pobres ceros de la izquierda!

    ResponderEliminar
  2. Esto es como aquello de "El que a buen árbol se arrima, buena sombra le cobija". O "Dime con quien andas y te diré quien eres". Valemos no sólo lo que somos sino también lo que valen los amigos que nos rodean. Es importante elegirlos bien y dejarles ocupar un buen lugar.

    Bonita lección con ingeniosos versos. Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Muy bueno el verso Chelo...esta imagen sí qué vale más que mil palabras...Cuandos Dos hay por el mundo presumiendo de lo que no son.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  4. Genial Chelo, seguro que tus alumnos aprendían matemáticas sin ningún problema si tú se las enseñabas de forma tan lúdica.

    Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No Elena, en clase no se hablan de estas cosas vamos demasaido pillados de tiempoo con los extensos programas y no da tiempo a casi nada.
      Un abrazo

      Eliminar
  5. Como buena maestra en mates nos dejas toda una lección,amiga...
    Hemos de valorar la humildad,que en este caso sería el cero...El cero es un gran maestro y debemos darle el lugar que le corresponde,si aprendemos de él,tendremos fácilmente la sabiduría que buscamos...El orgullo nos lleva siempre a un callejón sin posibilidades de salida...
    Mi gratitud por tus palabras,mi felicitación y mi abrazo inmenso,amiga.
    M.Jesús

    ResponderEliminar
  6. Te vas de viaje y no me llevas, ni me llamas, ni me escribes... dejas las matemáticas por las letras y vuelves a ellas... quiero más, mucho más. Lo mío no es un "pasatiempo".
    Te he echado de menos y regresas con un romance a los números muy peripuesto. Estoy encantado de saber de ti; pero saber algo más de lo acontecido en la ciudad Condal.
    Un fuerte abrazo, compartido con Javier (no están los tiempos para despilfarrar).

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Paco he estado en Valencia a la ciudad Condal vamos la próxima semana y por supuesto te mantendremos informado.
      Un abrazo

      Eliminar
  7. Hola Chelo!!!! Imagino que la reunión en Granada, además de divertida y cultural, ha sido un aglomeración de amantes de los números.... lo digo por la fábula que hoy nos regalas!!!! jajajajajja!!!!
    Los ídolos de barro con el tiempo se caen... es buena enseñanza aplicar en nuestra vida que la humildad ha de ser valor permanente en todos nuestros actos. Enhorabuena por esta entrada tan didáctica. Besos extremeños.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí Liova, no la conocía y en el autobús camino de Pampaneira la leyeron, me gusto tanto que decidí ponerla aquí.
      Un abrazo

      Eliminar
  8. ¿Que es el hombre?...pregunta Pascal. Una potencia de exponente cero.
    Ya lo había leido Chelo a pesar que las matemáticas no son mi fuerte. Solo puedo decir con respecto a ti lo que dice Weirstrass "Un matemático que no es también algo de poeta, nunca será un matemático completo" Un beso

    ResponderEliminar
  9. Nunca hay que menospreciar a nadie y a nada. La humildad siempre por delante junto al amor.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  10. La magia de los números nunca deja de sorprenderme.

    ResponderEliminar
  11. A mí los ceros me encantan... les tengo un cariño especial!

    Estos ceritos de hoy, ya ves, que han encontrado parejas bien dispares, y así les ha ido, por caminos diferentes!

    Muy curioso el pastiempo de hoy!

    Gracias!

    Un besote!
    ;)

    ResponderEliminar
  12. Qué pena no tener cursos actualmente! la fábula me vendría de perillas para motivarlos.
    Beso y espero que otros la usen

    ResponderEliminar
  13. El 0 el 1 y el 2, muy divertido y con gran mensaje. Besos.

    ResponderEliminar
  14. Mira Chelo, cuando enseño lo que hace en 0 en cada operación matemática, los alumnos se sorprenden. Sobre todo cuando aparece en la división. Y lo bien que lo aprenden, pues nunca más lo olvidan. Lo tratan con mucho respeto, porque seguro que cuando él aparece, algún alumno cae en sus garras,e imagínate el final del ejercicio.
    Gracias por la visita. Un beso y buena semana.

    ResponderEliminar
  15. Los números son tan maravillosos que hasta en poesía se convierten. Muy buena tu entrada y que pases muy bien lo que resta de semana.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  16. Brillante inserción, me gusta tu blog....un abrazo de azpeitia

    ResponderEliminar
  17. El poema es fantástico y sigue vigente. Ay los ceros, pero no hay que restarles importancia. Son muy valiosos y bonitos.
    Cuantas veces en la vida tenemos que partir de 0 para llegar a a alguna parte.
    Bss

    ResponderEliminar
  18. Chelo, me volvía loco buscando infructuosamente estos versos que en nuestros tiempos recitábamos en el colegio,y ahora tú me los facilitas. Muchas gracias. Estoy todavía de viaje y voy muy retrasado con lecturas y comentarios, ya me pondré al día. Un beso desde Benidorm.

    ResponderEliminar
  19. Lo que me asusta es cuando hay personas que ven a sus iguales como simples números...

    ResponderEliminar
  20. Una sencilla lección de humildad, que tanto cuesta aprender.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  21. Oye Chelo, esta forma de entrar en el mundo de las matemáticas es buenisima, lastima que los maestros anden tan pillados de tiempo que no puedan enseñar las matemáticas con poesías numéricas tan preciosas como esta.

    Un fuerte y calido abrazo

    ResponderEliminar
  22. Me gusto la poesía y lo que dice, el cero, redondo, pero sin vuelta, esa eterna,
    un abrazo.

    ResponderEliminar
  23. Mi abuela me recitaba esto cuando era una niña. Gracias por hacerme revivir recuerdos. Muy buena historia y con una profunda moraleja. Saludos.

    ResponderEliminar

Gracias por pasar tu tiempo conmigo.